La vida es un tango
en el que somos la mueca
de nuestra verdades
Obra de teatro escrita por César Hazaki (clik aquí para entrar en su blog) y Carlos D. Pérez, con música compuesta por Hernán Bonadeo y Carlos Hilzerman, letras de Carlos Pérez.
Interpretada por el “grupo finaconcurrencia”, en los siguientes papeles:
Ciriaco Lauría…………………………..César Hazaki
Analista…………………………………Carlos D. Pérez
Payo Ruiz……………………………….Hernán Bonadeo
Tiresias, el carnicero……………………Carlos Hilzerman
Pato Laguna…………………………….Carlos D. Pérez
La Rosita………………………………..Alejandra Maula
El coro y temas musicales………………Hernán Bonadeo, teclado y voz, Carlos Hilzerman, guitarra y voz,
Alejandra Maula, voz
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Dirección general………………………. Raquel Albéniz
Asistente de dirección………………….. Erika Halvorsen
Vestuario………………………………...Coni Marino
Iluminación………………………………Mónica Scandizzo
Maquillaje………………………………..Laura Bosco
Estrenada el 23 de agosto de 2003 en el Teatro Fray Mocho, Ciudad de Buenos Aires. Ese mismo año fue también representada en el Aula Magna de la Universidad Nacional del Centro, Tandil, y en 2004 en Grissicultura, Centro Cultural de Grissinópoli, Ciudad de Buenos Aires.
Cuidadoso de las formas, el “grupo finaconcurrencia” dejó constancia de la trayectoria de cada integrante en el siguiente documento:
CURRICULA VITARUM ET STUDIORUM
FINA CONCURRENTIA INTEGRANDI
Hernán Bonadeo comenzó a estudiar piano a los 4 años y continuó sus estudios de música hasta los dieciocho, interviniendo en recitales en distintas salas de Buenos Aires. En tiempos menos remotos se presentó en público acompañando cantantes de música culta y popular. Como integrante del grupo finaconcurrencia participó y participa de Tangos para cantar en el diván y Pena Maleva. Entre sus composiciones tempranas se destaca la Cantata para soprano solista, coro mixto y 11 instrumentos de percusión (inédita e ininterpretada); recientemente compuso parte de la música de Pena Maleva, que comprende tangos, milongas y un vals.
Es Profesor Titular en el Departamento de Física de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA. Hasta el año 2000 fue investigador de la CNEA e Investigador Principal del CONICET. Sus hits científicos llevan atractivos nombres tales como: Un método para la construcción de las configuraciones no-equivalentes de “clusters” finitos con desorden celular usando teoría de grupos, de obvia raigambre morenista, o Nuevas fases superduras de fulleritas basadas en C60, relacionada directamente con Pena Maleva
César Manuel Hazaki fracasó a temprana edad con el fútbol; pese a sus esfuerzos no logró remediar el traspié jugando al básquet. Por ello no pudo hacer la carrera de director técnico en AFA y como siempre tuvo problemas con la ley, entendió que no era conveniente ser árbitro o soplapitos de balonpié. Como es obstinado se dedicó al psicoanálisis, en especial al de adolescentes, y actualmente edita, con Enrique Carpintero y Alejandro Vainer, la revista Topía.
Escribió con Enrique Carpintero la Enciclopedia de la sexualidad Infantil y con Carlos D. Pérez la tanguedia Pena Maleva.
Realizó su formación actoral con Franklin Caicedo, José Maria Landi y Augusto Fernandes.
Arquitecto y músico, Carlos A. Hilzerman comenzó a estudiar guitarra a los doce años. Con precocidad inusitada, a los quince era ya un adolescente. Su pasión por la música provocó un cúmulo de auditorios vacíos. Insistente, logró acompañar a varios cantantes y también formar varios grupos musicales como Latinurbano, Cantares y Prisma Trío. Actuó en radio y televisión y aunque no lo quiera contar, con uno de esos grupos se presentó en Feliz Domingo. Permeable a los vaivenes históricos, tocó también guitarra eléctrica y charango. Integra finaconcurrencia, con quienes tuvo el honor de presentarse en Buenos Aires, Tucumán y Montevideo.
Arquitectónicamente hablando, forma parte del Estudio Álvarez Hilzerman. Entre otras, es autor de las casas en las que se lo suele ver (y oír) al Dr. Carlos D. Pérez. Se especializó en el diseño asistido por computadora. Es uno de los primeros en desarrollar cursos vía e-mail, teniendo alumnos en la mayoría de los países de habla hispana.
Alejandra Maula canta desde que tiene voz y realizó juegos dramáticos desde la temprana infancia. Participó de todos los coros que hubo en la escuela y también en algunos dirigidos por Ricardo Gräetzer y Storni. Debutó como solista con Tangos para cantar en el diván y ahora en Pena Maleva, también como actriz. Con frecuencia debe aclarar que Maula no es seudónimo sino su apellido real; de haberse llamado Siboney tal vez cantaría boleros.
Es médica psicoanalista y cada tanto escribe algún “paper” sobre clínica, la estructuración del aparato psíquico y el misterio de las relaciones entre cuerpo y psique.
Según testimonios de su madre, Carlos D. Pérez fue un niño prometedor. Pero su vida tuvo un vuelco al comenzar a analizarse con un psicoanalista de militancia peronista, cuando comprendió que mejor que prometer es realizar. Decidido, plantó algunos árboles, tuvo dos hijos y escribió un montón de libros cuyos títulos le gusta citar porque son lo mejor que tienen. Lectores y amigos están recolectando firmas para dirigirle un petitorio a su analista urgiéndolo a darle el alta o a cambiar el paradigma.
Quienes lo conocen aconsejan no mencionarle el jazz porque es capaz de empuñar la trompeta y querer emular a Miles Davis.
Raquel Albéniz, actriz a cargo de la dirección general de Pena Maleva, cursó estudios con Manuel Iedvabni –interpretación-, Laura Yussem –expresión corporal-, Ricardo Halac –análisis de texto- y ha hecho talleres actorales con Inda Ledesma –Shakespeare-, Héctor Malamud –el cuerpo cómico-, Luis Rossini –géneros teatrales-, Perla Jaritonsky –expresión corporal-, Sandro Nunziata, Paula Etchebehere y José Garófalo –tango-. Desde 1980 dirige talleres de actuación en diversas instituciones y escuelas. En teatro ha dirigido la puesta de obras como “El vicio absurdo”, “Nieblas”, “Viudas”; como actriz ha integrado el elenco de numerosas obras, en teatro y televisión, algunas de ellas son “El Alcalde de Zalamea”, “Juan Moreira Supershow”, “Esperando la carroza”, “¿Cuánto cuesta el hierro?”, “Borkman”, “El amor tiene cara de mujer”, “Campeones”.
Su ductilidad tuvo una prueba de fuego al llevar a escena Pena Maleva dirigiendo a tres psicoanalistas heterodoxos, un arquitecto ciberespacial y un físico de configuraciones no-equivalentes.
